Título: Solaris.
Autor: Stanislaw Lem.
Traducción: Joanna Orzechowska.
Introducción: Jesús Palacios. Formato: 130 x 200 mm.
Páginas: 296 Págs.
ISBN: 978-84-15130-09-3
Precio: 20,95 Euros.
Sinopsis:
"Kris Kelvin acaba de llegar a Solaris. Su misión es esclarecer los problemas de conducta de los tres tripulantes de la única estación de observación situada en el planeta. Solaris es un lugar peculiar: no existe la tierra firme, únicamente un extenso océano dotado de vida y presumiblemente, de inteligencia. Mientras tanto, se encuentra con la aparición de personas que no deberían estar allí. Tal es el caso de su mujer —quien se había suicidado años antes—, y que parece no recordar nada de lo sucedido. Stanisław Lem nos presenta una novela claustrofóbica, en la que hace un profundo estudio de la psicología humana y las relaciones afectivas a través de un planeta que enfrenta a los habitantes de la estación a sus miedos más íntimos".
La primera vez que oí hablar de esta historia fue en 2.002, cuando se extrenó la película protagonizada por George Cooney. No vi la película en su momento y ahora, al cabo de los años he de confesar que tampoco lo he hecho y en parte lo agradezco, pues he podido disfrutar de la novela sin tener ninguna idea preconcebida.
No sé si se puede considerar a la peli una buena adaptación a la novela, o por el contrario, es uno de esos bodrios que es mejor no ver ni de reojo. En cualquier caso, la historia se me quedó grabada. Me pareció interesante. Además, creo que hay otra adaptación cinematográfica rodada en los años 70, de la que tampoco tengo muchas referencias.
Ahora, pasados los años, la editorial Impedimenta ha publicado la novela y por fin he podido adentrarme en la historia que en su día me pareció llamativa.
Solaris astá catalogada como una novela clásica e imprescindible de ciencia ficción. El señor Lem la escribió allá por 1.960, pero aunque ya ha llovido, es una novela intemporal. Creo que es de esas novelas que por mucho que avance la tecnología del ser humano y la realidad vaya superando a la ficción, nunca quedará condenada al ostracismo. Lo que cuenta y como lo cuenta estará siempre vigente. O al menos esa es la impresión que me da, aunque no soy ningún experto en novelas de ciencia ficción.
Stanislaw Lem nació en Polonia, en 1.921. Estudió medicina hasta que los alemanes invadieron Polonia y estalló la 2ª guerra mundial. Estuvo unos cinco años trabajando para la resistencia. Acabada la guerra, retomaría los estudios de medicina, pero terminaría abandonando al poco tiempo la facultad por discrepancias ideológicas.
Destacó como escritor de ciencia ficción, aunque entre sus publicaciones también hay textos sobre filosofía y metaliteratura. Aún así, de todas sus novelas, su obra cumbre fue sin duda alguna, Solaris.
Otro dato destacable sobre el autor, es que fue miembro honorario de la S.F.W.A. (Asociación Americana de Escritores de Ciencia- Ficción), de la que sería expulsado en 1.976 tras declarar que la ciencia-ficción estadounidense era de baja calidad. Falleció el 27 de marzo de 2006 en Cracovia a los 84 años de edad, tras una larga enfermedad coronaria.
Centrándome un poco en la novela, me gustaría decir que si bien todo el conjunto raya una calidad elevada, ha habido partes y partes. Al principio, la novela arranca de una manera tranquila, pero enseguida te mete en situación. Es de esas historias que avanzan a un ritmo pausado, pero intenso. Muestra las trazas típicas de novela clásica de misterio, pero extrapolado al género de ciencia-ficción, y eso, unido a la narrativa de Lem acaba por envolvelrte por completo.
Por otro lado, y por poner un pero, hay algunos fragmentos del texto que son un tanto farragosos, con explicaciones científicas y anotaciones sobre Solaris y los estudios cientificos que se han llevado a cabo del mismo, que si bien, aportan datos complementarios a la historia central, me han resultado un poco pesadetes.
En cualquier caso, he disfrutado de su lectura. Es una historia de ciencia ficción, que habla, por encima de todo, de sentimientos humanos, mostrando un cierto énfasis en el sentimiento de soledad y abandono que parecen albergar los protagonistas.
Interesante lectura, sin duda.
6 comentarios:
El género es solo un medio, no un fin. Gran novela. Interesante, densa, compleja y muy hermosa.
Pues tienes toda la razón Jorge.
El marco continente de la trama está, en este caso, supeditado a la historia, haciendo que el género quede en un segundo plano.
Ha sido una novela que me ha sorprendido y mucho.
¡Un saludo!
No he visto la película pero me regalaron el libro hace poco. Empezaré a leerlo esta semana.
Saludos,
www.artbyarion.blogspot.com
Hola Arion, no creo que te decepcione. Es una buena historia, de principio a fin.
Por cierto, tienes un blog muy interesante.
Un saludo y gracias por comentar.
Pues tenía entendido justamente lo que has comentado en tu artículo; que es un clásico de la ci-fi y una novela intemporal. No he leído mucho del género, pero cuando me apetezca algo de ello, sin duda Solaris será una buena elección.
Saludos.
Hola Jolan. La ciencia ficción no es un género que cultive demasiado, pero de lo poco que he leído de este género, Solaris es de lo que más me ha gustado. No creo que te defraude.
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